Al ver las escenas de Ferguson, Missouri desplegarse en el noticiero nocturno, ¿nos vienen algunas preguntas? Ciertamente, no son las escenas que esperamos ver en los noticieros del 2014 en los Estados Unidos. Pero, ¿qué es lo que vemos?

¿Estamos viendo un espejo? ¿Nos vemos como nos ven los demás? ¿Podemos vernos como Dios nos ve? ¿Sentimos el dolor y la frustración de quienes protestan? ¿Sentimos el miedo y la ansiedad de los policías?  ¿O los vemos como parte de un episodio de una serie de investigación policiaca?

Me pregunto si nos hemos vuelto insensibles a la auténtica agonía ajena, cuyo dolor y sufrimiento en la vida real no serán resueltos cuando termine el episodio. ¿Hemos caído víctimas de la cultura de la indiferencia que nos insensibiliza al sufrimientos ajeno?

¿Hemos perdido la capacidad de sentir el dolor de quienes son diferentes a nosotros? Espero que no. Les ruego que traten de ser más compasivos y menos críticos. Le pido a Dios que otorgue paz, justicia, comprensión y misericordia a la gente en Ferguson y a lo largo de este gran país y nos conceda la sabiduría de vernos a nosotros mismos como nos ve Dios.